Tiene 5 hijos. Con acuerdo del progenitor, la madrina de la menor obtuvo su tutela dativa. Los otros adolescentes permanecen al cuidado de terceros. En representación del Ministerio Público de la Defensa, la actual tutora fue patrocinada legalmente y en forma gratuita por la Defensora Oficial Civil N° 9, Ruth Guzmán de Genovese.
En una demanda en la que se solicitó la tutela dativa de una niña menor de edad, la Defensora Oficial Civil N° 9, Ruth Guzmán de Genovese, señaló que iniciaba el trámite en representación de la madrina de la menor y en razón de que el padre de la pequeña se había ido a vivir al Sur del país tras enviudar, dejando a todos sus hijos al cuidado de terceros.
Originalmente, la chiquita se encontraba al cuidado de su tía materna -al igual que sus otros 4 hermanos y hermanas-, pero frente a situaciones de desigualdad acreditadas en el expediente judicial le pidió a su madrina ir a vivir con ella.
Así fue como la niña se integró a un hogar en el que se sintió a gusto y protegida. Tanto que los testigos citados durante el proceso, en este caso todos vinculados al ámbito educativo de la menor, refirieron que durante cada crisis y cuando se requirió asistencia de un ser querido; la pequeña pidió por su madrina. Dijeron, además, que desde que la mujer la acogió en su casa, la chiquita evidenció cambios muy favorables en lo físico, psicológico y psicopedagógico.
En relación al progenitor, el expediente contiene un acta en la que el hombre manifiesta su deseo de que la niña conviva con su madrina y su familia, que él se encontraba de paso por Salta, que se sentía tranquilo de que la menor se encontrara bien aunque le gustaría que tuviese contacto con sus hermanos que viven con su cuñada también en esta provincia y que entregaba toda la documentación necesaria para que la madrina pudiera iniciar los trámites de tutela dativa.
Por su parte, escuchada la niña, dijo: “Estoy bien aquí (en la casa de su madrina) porque me tratan bien, lo que necesito me compran, (…) recibo consejos para mi bien. Me controlan mis llegadas, me cuidan como también cuidan a sus hijos. Ellos (…) no hacen diferencias conmigo y sus hijos. Limpio mi habitación, levanto la mesa y barro, pero más tiempo me dedico a mis estudios por recomendación de ellos. Visito a mis 4 hermanos que están con mi tía”.
Finalmente, los jueces que atendieron el caso consideraron el testimonio de la menor y toda la prueba aportada para finalmente fallar a favor de la madrina de modo tal que ahora la niña podrá contar con beneficios sociales a los que antes se encontraba impedida de acceder.